La cantidad diaria de bayas que puede comer una persona sana es pequeña: hasta 200 gramos. Esto es así si no tienes gastritis aguda ni diabetes.
Si tiene gastritis, pero realmente desea comer algunas bayas, no las combine con alimentos ácidos o semiacidos: frambuesas, cerezas, uvas, ciruelas, manzanas y, sobre todo, cítricos.
Es mejor no combinar cerezas y legumbres. Por ejemplo, no comas estas bayas como postre si antes has comido sopa de guisantes.
El hecho es que tanto las cerezas como las legumbres pueden causar hinchazón y aumento de gases. Al mismo tiempo, aumentan la probabilidad de problemas intestinales.
Por cierto, no se deben comer cerezas inmediatamente después de las comidas, sino que es mejor esperar al menos media hora para que las bayas tengan un efecto positivo en el sistema digestivo.
